Hola a tod@s!!!
Como ya vimos en artículos anteriores, estructuramos nuestro huerto en cinco bancales: 3 grandes y dos más pequeñitos, es decir, como si fuesen cuatro bancales. Lo hicimos así para plantear el huerto como un sistema de rotación de cultivos, es decir, que el bancal 1 el año que viene pasará a ser el 2, el bancal 2 será el 3 y así sucesivamente.
Después de los talleres de siembra, fue una época de riegos eventuales, puesto que este año el otoño ha sido muy seco, y de espera para ver germinar nuestras semillas. Con cariño e ilusión vimos cómo en un breve periodo de tiempo esos granitos que colocamos en la tierra empezaban a transformarse en pequeñas plantitas. Primero echando dos hojitas que ya sabemos que no son las hojas verdaderas, si no que se llaman cotiledones y después sacando sus primeras hojitas verdes.
Casi al final del trimestre recibimos un paquete anónimo con unos cuantos plantones de lechuga, brócoli, col, coliflor, cebolleta, algunas macetillas de lavanda, tomillo y romero, y un montón de ajos. Estos últimos ya los teníamos sembrados, pero bueno siempre son bienvenidos los recursos, así que el resto de plantones sí que los llevamos a nuestro huerto teniendo en cuenta la estructura que habíamos planificado.
De esta manera se nos quedó el huerto: en el bancal 1 teníamos habas y guisantes, y en el centro trasplantamos algunas coles y lechugas; en el bancal 2 sembramos las espinacas, el apio y las cebollas, y en el medio colocamos algunas lechugas más y brócoli; en el bancal 3 sembramos ajos y zanahorias (muchas zanahorias); y en el bancal 4 y 5 sembramos abono verde (habas y veza). Aprendimos que el abono verde son plantas que sembramos con la finalidad de preparar la tierra para las plantas de verano, es decir, son plantas de las cuales no vamos a sacar provecho directo.
Aquí os dejamos un vídeo con algunos de los momentos de este período. ¡¡¡Esperamos que os guste!!!
¡¡¡Hasta pronto!!!
